Nos hizo un día estupendo. Básicamente la idea fue ir a la explanada del castillo y sacar unas fotos, ir bajando por la Royal Mile mirando detenidamente casi todo, desde los callejones "con encanto" hasta los escaparates de las tiendas, parando en una pastelería especializada en fudges. Nuestro destino era claro: subir al Arthur's seat, desde donde se ve una vista espectacular de Edimburgo.
Para subir al Arthur's seat hay dos caminos.... el de la derecha, díficil pero con una vista muy buena de la ciudad y el de la izquierda, que va por el valle y es mucho más fácil pero por donde no ves nada. Como estábamos sobrados cogimos el camino de la derecha.... es duro. De hecho subes a dos montes antes de subir al del Arthur's seat, con sus respectivas bajadas (parciales, pero no despreciables).
Tras conseguir nuestro objetivo, bajamos por la zona fácil. Y bueno, realmente se la llama así por algo, porque en un plis-plas vuelves al parlamento. Tras bajar, y como teníamos hambre, fuimos a la cafetería del parlamento tras pasar un control de seguridad propio de un aeropuerto.
Después del piscolabis, fuimos para la catedral (cuando bajamos la Royal Mile estaban en oficio), tomamos unas fotos y fuimos a perdernos por la ciudad en busca de la universidad.
Y con esto acabó el viaje :) Más fotos (muchas más) en el set de Flickr.
2 comentarios:
Que bien se vive de erasmus... Tenía que haber pedido dos tazas.
Saludos desde España!
La primera foto del post es sencillamente increíble
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